¿Te has encontrado alguna vez en una situación en la que no has tenido más remedio que alejarte de una persona que sabías que nunca sería la adecuada para ti?
En una situación en la que la única opción para usted era ser lo suficientemente fuerte como para recoger el piezas rotas de ti mismo y seguir adelante con tu vida, de la mejor manera posible?
Si alguna vez has pasado por algo llamado seguir adelante, sabes exactamente de lo que estoy hablando.
Si lo has hecho, esta es una historia sobre ti, sobre tu fuerza interior y sobre todo lo que tuviste que pasar para finalmente seguir viviendo tu vida.
Esta es la historia de una chica que finalmente decidió seguir adelante, aunque no fue nada fácil. Sobre una chica que decidió dar ese paso porque era la única forma que tenía de salvarse.
Una historia sobre una chica que fue lo suficientemente valiente como para alejarse de alguien que le estaba haciendo daño y de alguien que nunca mereció tener un lugar en su vida.
Una historia sobre una chica y su intento de recuperar por fin el control sobre su vida y volver a tomarla en sus manos.
Esta es la historia de una chica que se eligió a sí misma por encima de este hombre tóxico que ella amaba y que fingía que él también la amaba.
Sobre una chica que decidió dejar atrás todo lo negativo. Dejar todo el dolor en el pasado, donde pertenecía, y avanzar hacia el futuro más brillante que se merecía.
Una historia sobre la chica más poderosa del mundo.
No les voy a mentir: seguir adelante no fue fácil para ella. De hecho, fue una de las decisiones más duras y dolorosas que tuvo que tomar.
Pero lo hizo porque sabía que era algo que tenía que hacer y algo que era capaz de hacer.
Durante mucho tiempo, luchó contra sus sentimientos. Luchó contra ese tipo que intentaba constantemente atraparla de nuevo en su círculo de mentiras y manipulaciones.
Luchó con todo el futuro que había planeado para los dos.
Pero cuando miró las cosas con realismo, vio la verdad. Ella vio que él no estaba poniendo ningún esfuerzo en su relación.
Vio que nunca la quiso como debía y vio que la estaba utilizando.
Sobre todo, vio que no era el hombre que quería a su lado, que no era el hombre que la merecía y se dio cuenta de que podía salir adelante sin él a su lado.
Vio que ese hombre sólo le traía problemas. Que no la hacía feliz y que no debía tener miedo de caminar sola por la vida.
Por fin vio lo poderosa que era en realidad. Ella vio que él la había estado disminuyendo todo el tiempo porque tenía miedo de su fuerza.
Vio que se había sentido intimidado por ella todo el tiempo porque temía que acabara viendo su verdadera cara.
Eso fue exactamente lo que ocurrió. Se alejó de él, siguió adelante con su vida y nunca miró atrás.
No, no fue fácil y nunca afirmó que lo fuera, porque su lucha no había terminado ahí.
Y esta decisión no fue nada fácil de tomar. Pero sabía que era la correcta.
Sabía que era más fuerte que todo el dolor. Sabía que podía hacerlo. Sabía que tenía que seguir adelante.
Y finalmente siguió adelante. Continuó viviendo su vida como si este tipo nunca hubiera existido.
Por fin lo vio como lo que realmente era: un gilipollas egoísta y un manipulador tóxico.
Y lo que es más importante, por primera vez se vio a sí misma con claridad. Vio de todo lo que era capaz. Vio que podía conseguir todo lo que se propusiera.
Vio lo fuerte que era en realidad. Recanalizó todo el amor que sentía por ese tipo hacia sí misma.
Empezó a quererse a sí misma como solía quererle a él. Empezó a tratarse con cariño y por fin se dio prioridad a sí misma.
Y fue entonces cuando por fin se dio cuenta de lo que había hecho. Fue entonces cuando se dio cuenta de que estaba en el mismo lugar en el que ella lo había dejado, mientras que él lo había superado hacía tiempo.
Cuando vio que ella podía salir adelante sin él, comprendió por fin qué clase de chica había perdido. Por fin comprendió lo que le había estado haciendo durante años.
¿O sólo fingió darse cuenta de todo esto para poder tenerla de vuelta? ¿Para poder seguir haciéndole daño y abusando emocionalmente de ella?
Bueno, la verdad es que ella nunca lo averiguará. Porque por suerte para ella, nunca le dio la oportunidad de romperle el corazón de nuevo.