Para muchos, encontrar un alma gemela en la era actual parece un sueño que nunca se hará realidad. Es como si todos hubiéramos aceptado el hecho de que no vamos a ninguna parte.
Sin embargo, rara vez nos preguntamos por qué. ¿Cuáles son los problemas de encontrar "al elegido" en el mundo moderno? Pues tenemos las respuestas.
1. El amor equivale al apego
En el mundo moderno de las citas, el amor no existe. Al menos, no existe en la forma que conoces.
Al contrario, se te acusa automáticamente de patético si buscas algo que antes era lo mínimo.
Si eres romántico, eres cursi y si quieres atención, estás necesitado.
No te voy a mentir: comportamiento demasiado pegajoso nunca ha sido atractiva. Sin embargo, no estás necesitada por esperar un mensaje de buenos días o por querer ver a tu novio un par de veces a la semana.
No eres patética por decirle lo mucho que significa para ti y no eres cursi por pedirle que escuche una canción de amor que te recuerda a él.
Sin embargo, la verdad es que en las citas modernas no se permite hacer ninguna de estas cosas, a menos que quieras que te llamen anticuado.
Entonces, ¿cómo se puede crear un vínculo con un hombre si todas estas cosas están prohibidas?
2. La infidelidad se ha normalizado
Otro gran problema de las citas modernas, que impide encontrar a la persona adecuada, es que, lamentablemente, la fidelidad ya no se valora como antes.
De hecho, el concepto de engaño ha cambiado tanto que, al final, simplemente no se sabe qué se considera un comportamiento aceptable.
La cuestión es que la gente ya no poner una etiqueta a sus relaciones. Ya nadie es exclusivo, lo que le da derecho a ver a varias personas al mismo tiempo.
Así que, cuando no tienes pareja y cuando sólo sales con alguien, también puedes salir con otras personas.
Puedes estar en contacto con un chico durante un tiempo, pero si no te llama novia (que probablemente no lo hará) no puedes acusarle de ser infiel si le pillas mandándose mensajes o incluso acostándose con otra persona.
Suena muy mal, ¿verdad? Bueno, técnicamente también puedes seguir haciendo lo mismo, pero en este tipo de situación, ¿es posible encontrar el amor verdadero? Yo creo que no.
3. Todo el mundo tiene fobia al compromiso
Estoy aquí para hacer una pregunta crucial: ¿realmente nos hemos vuelto todos tan miedosos del compromiso o ha fobia al compromiso convertirse en algo?
¿Realmente nos hemos vuelto todos inaccesibles emocionalmente o es que la gente tiene miedo de decir que busca un verdadero romance porque esperan que se les considere ingenuos por creer en esas cosas?
Sea cual sea la respuesta, la conclusión es la misma: mire donde mire, se topará con fóbicos al compromiso.
Personas que no tienen el deseo de conectar de verdad con alguien o de entablar relaciones reales.
Sí, vivir el momento es genial. Al fin y al cabo, nunca se sabe lo que nos deparará el mañana, así que es mejor disfrutar de cada aliento como si fuera el último.
Sin embargo, cuando estás atrapado en medio de una cultura que no cree en la entrega total a otro ser y que no cree en la construcción de un futuro como parte de una pareja, encontrar al elegido a menudo parece misión imposible.
4. Sus expectativas se reducen
Te guste admitirlo o no, en el mundo moderno de las citas, tus expectativas disminuyen constantemente.
Aunque no tengas una relación moderna, no puedes evitar que te afecte lo que ves en la vida de los demás.
De hecho, todo el mundo te acusa de ser demasiado exigente sólo porque tienes unas normas básicas.
La gente te mira como si estuvieras loco si esperas ciertas cosas que solían ser normales, como la fidelidad, la atención sin reservas y, lo más importante, el amor incondicional.
Al cabo de un tiempo, sin darte cuenta, empiezas a conformarte con menos. Te adaptas al resto del mundo y adoptas "la nueva normalidad".
5. La cultura de las citas se ha convertido en un campo de juego
Por último, pero no por ello menos importante, cuando esté en el grupo de citasEl principal problema con el que te vas a encontrar es que la cultura de las citas se ha convertido en algo parecido a un campo de juego infantil.
Todo gira en torno a juegos mentales inmaduros a los que todo el mundo juega. Básicamente, las citas se han convertido en una competición. La cuestión principal es quién engañará a quién.
Se espera que conozcas el procedimiento, aunque no exista un manual sobre cómo debes comportarte correctamente.
Así que la mayor parte del tiempo, en lugar de centrarte en construir una relación potencial, tienes que dominar el arte de jugar a estos juegos de citas, te guste o no.
En lugar de disfrutar de tu vida amorosa, te ves presionado a diseccionar las palabras y acciones de los demás.
Tienes que hacer todo lo posible para leer a través de sus señales contradictorias y llegar al fondo de sus intenciones.
En pocas palabras: el truco consiste en ser más astuto que la otra persona. Es casi como si trabajarais el uno contra el otro, en lugar de estar unidos por el objetivo común de ser felices.